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Mi corazón se siente libre cuando esta contigo y cuando escribe, siempre sobre tí, porque al escribir de desahoga, es como llorar, pero sólo lo hace por dentro y cuando no puede más necesita soltarlo.
Lo creas o no eres una necesidad, te necesito para respirar, para vivir. Si de verdad me quieres quédate conmigo, pero no un día, ni dos, ni hasta que te canses... prométeme que estarás conmigo para siempre, sin excepciones, para poder seguir respirando, júrame que no me vas a soltar, que no me dejarás sola, pero sólo hazlo si de verdad lo sientes, no vuelvas a hacerme daño, porque esa sería la gota que colmase el vaso, y eso que ya lo has derramado varias veces.